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 Verdes tardes de la selva; tardes 
tristes. Río verde 
entre zacatales verdes; 
pantanos verdes. 
Tardes olorosas a lodo, a hojas mojadas, a 
helechos húmedos y a hongos 
el verde perezoso cubierto de moho 
poco a poco trepando de rama en 
rama, con los ojos cerrados como 
dormido pero comiendo 
una hoja, alargando un garfio primero 
y después el otro, 
sin importarle las hormigas que le pican, 
volteando lentamente el bobo rostro 
redondo, primero a un lado 
y luego al otro, 
enrollando por fin la cola en una rama 
y colgándose pesado como 
una bola de plomo; el salto del sábalo en el río; 
el griterío de los monos comiendo 
malcriadamente, a toda prisa, 
arrojándose las cáscaras de anona unos a otros 
y peleándose, charlando, arremedándose 
y riéndose entre los árboles; 
monas chillonas cargando a tuto monitos 
pelones y trompudos; 
la guatusa bigotuda y elástica 
que se estira y encoge 
mirando a todos lados con su ojo redondo 
mientras come temblando; 
espinosas iguanas… Temblando; 
espinosas iguanas 
como dragones de jade 
corriendo sobre el agua 
(¡flechas de jade!); 
el negro con su camisa rayada, remando 
en su canoa de ceiba. 
Una muchacha meciéndose en una hamaca, 
con su largo pelo negro, y una pierna desnuda 
colgando de la hamaca, 
nos saluda: 
adiós, california! 
el río negro, como tinta, al anochecer. 
Una flor de un hedor putrefacto 
como de cadáver; 
y una flor horrible, peluda. 
Orquídeas 
guindadas sobre el agua podrida. 
Silbidos tristes de la selva, 
y quejidos. 
Quejidos. 
Hojas tristes que caen dando vueltas. 
Y chillidos… 
¡Un grito entre las guanábanas! 
el hacha cortando un tronco 
y el eco del hacha. 
¡El mismo chillido! 
ruido sordo de manadas de cerdos salvajes. 
¡Carcajadas! 
el canto de un tucán. 
Chischiles de culebras cascabeles. 
Gritos de congos. 
Chachalacas. 
El canto melancólico de la gongolona 
entre los coquitales, 
y el de la paloma popone, 
popone, pone, pone 
oropéndolas sonoras 
columpiándose en sus nidos colgados de las palmeras, 
y el canto del pájaro-león entre los coyoles 
y el del pájaro de-la-luna-y-el-sol 
el pájaro clarinero, el pájaro 
relojero que da la hora 
y el pocoyo que canta de noche (o caballero) 
cabayero mi dinero cabayero mi dinero 
parejas de lapas que pasan gritando, 
y el guis, chichitote y dichoso-fui 
dichoso-fuiiiiiiii 
que cantan en los chagüites sombríos. 
Plateados pantanos rielando, 
y las ranas cantando 
rrrrrrrrrrrrr 
!y un pájaro que toda la noche repite. 
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