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I
Bello mundo de miserias
De la noche y los campos
II
Rostros benignos en llamas rostros benignos en el fondo
Que rechazan la noche las injurias y los golpes
III
Rostros benignos para todo
He aquí el vacío que los fija
Su muerte servirá de ejemplo
IV
La muerte corazón derrumbado
V
Ellos los harán pagar el pan
El cielo la tierra el agua el sueño
Y la miseria
De su vida
VI
Ellos dijeron anhelar la benigna inteligencia
Ellos restringieron a los fuertes juzgaron a los locos
Practicaron la caridad partían un centavo en dos
Ellos saludaban a los cadáveres
Ellos derrochaban amabilidad
VII
Ellos persisten ellos se exceden ellos no son de nuestro mundo
VIII
Las mujeres los niños tienen el mismo tesoro
De hojas verdes de primaveras de leche pura
Intacto
En sus limpios ojos
IX
Las mujeres los niños tienen el mismo tesoro
En los ojos
Los hombres lo defienden como pueden
X
Las mujeres los niños tienen las mismas rosas rojas
En los ojos
Cada uno muestra su sangre
XI
El miedo y el coraje de vivir y de morir
La muerte tan difícil y tan fácil
XII
Hombres para quienes este tesoro fue cantado
Hombres para quienes este tesoro fue arruinado
XIII
Hombres reales por quienes la desesperanza
Alimenta el fuego devorador de la esperanza
Abramos juntos el último botón del porvenir
XIV
Parias la muerte la tierra y el horror
De nuestros enemigos tiene el color
Monótono de nuestra noche
Nosotros tendremos razón
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