El caso es que tengo la nariz fracturada que me dio…
[Poema - Texto completo.]
Roque Dalton
El caso es que tengo la nariz fracturada que me dio
el tico Lizano con un ladrillazo
porque dije que evidentemente era falta
y me dijo que no, que no, que no
nunca más le voy a dar la espalda a un futbolista guatemalteco
el padre Achaerandio casi se muere del susto
porque al final hubo más sangre que en un altar azteca
y luego fue Quique Soler el que me pegó en el ojo derecho
con la piedra más perfecta que te puedas imaginar
claro que solo estábamos intentando recrear el desembarco en Okinawa
pero lo que me pasó fue una rotura de retina
un mes en cama (¡a las once!)
una visita al doctor Quevedo en Guatemala
y al doctor Bidford que llevaba una peluca roja
por eso a veces entrecierro los ojos
y parezco un drogadicto aturdido cuando salgo del cine
la otra razón es el golpe de botella de ron
que me dio el marido de María Elena
en realidad no quise hacer daño
pero pues cada marido es un mundo
y si tenemos en cuenta que él pensó que yo era un diplomático argentino
hay que decir gracias a Dios
la siguiente vez fue en Praga nunca supimos quién lo hizo
se saltaron cuatro matones yo en un callejón oscuro
a dos cuadras del Ministerio de Defensa
y a cuatro cuadras de las oficinas de la Seguridad del Estado
era la noche anterior a la apertura del Congreso del Partido
por lo que alguien dijo que era una manifestación anticongreso
(en el hospital me encontré con dos delegados más
que habían salido de sus respectivos asaltos
con más huesos que nunca)
alguien más pensó que era la CIA tratando de desquitarse de mi escape
de la cárcel
otros más que era un ejemplo de racismo antilatinoamericano
y algunos de nada más que el apetito universal por el robo
el camarada Sobolev vino a preguntarme
si no le había pellizcado el culo a una mujer escoltada
antes de protestar al Ministerio del Interior
en nombre del Partido Ruso
finalmente no hubo pistas
y nuevamente tenemos que decir gracias a Dios
que seguí como parte ofendida hasta el final
durante una investigación realizada en la patria de Kafka
en todo caso (y para lo que me interesa aquí)
los resultados fueron
una doble fractura del maxilar inferior
una conmoción cerebral severa
un mes y medio en el hospital
y dos meses más tragando hasta bistecs en líquido
y la última vez
fue cuando bajaba una ladera bajo la lluvia
con un tubo de hierro en los brazos
cuando de repente sale un toro de quién sabe dónde
se me enredaron los tobillos en la maleza y empecé a caer
el toro pasó corriendo pero como era un capullo enorme
no se dio la vuelta para rematarme
aún así no fue necesario porque
como decía caí sobre el tubo
que no supo más que saltar hacia atrás como una revolución
en África
y me rompió el arco cigomático (que es crucial
para la calidad estética de los pómulos) en tres pedazos
Eso al menos en parte explica mi problema