Fantasías mexicanas
[Minicuento - Texto completo.]
Julio Torri…al moro Búcar y a aquel noble marqués de Mantua, teníalos de su linaje. Por el angosto Callejón de la Condesa, dos carrozas se han encontrado. Ninguna retrocede para que pase la otra.
-¡Paso al noble señor don Juan de Padilla y Guzmán, marqués de Santa Fe de Guardiola, oidor de la Real Audiencia de México!
-¡Paso a don Agustín de Echeverz y Subiza, marqués de la Villa de San Miguel de Aguayo, cuyos antepasados guerrearon por su majestad cesárea en Hungría, Transilvania y Perpiñán!
-¡Por bisabuelo me lo hube a don Manuel Ponce de León, el que sacó de la leonera el guante de doña Ana!
-¡Mi tatarabuelo Garcilaso de la Vega rescató el Ave María del moro que la llevaba atada a la cola de su bridón!
Tres días con sus noches se suceden y aún están allí los linajudos magnates, sin que ninguno ceda el paso al otro. Al cabo de estos tres días -y para que no sufriera mancilla ninguno de ambos linajes- mandó el virrey que retrocedieran las carrozas al mismo tiempo, y la una volviose hacia San Andrés y la otra fuese por la calle del Puente de San Francisco.
FIN