¡Los tiempos son de lucha! ¿Quién concibe
el ocio muelle en nuestra edad inquieta?
En medio de la lid canta el poeta,
el tribuno perora, el sabio escribe.
Nadie el golpe que da ni el que recibe
siente, a medida que el peligro aprieta:
desplómase vencido el fuerte atleta
y otro al recio combate se apercibe.
La ciega multitud se precipita,
invade el campo, avanza alborotada
con el sordo rumor de la marea.
Y son, en el furor que nos agita,
trueno y rayo la voz; el arte, espada;
la ciencia, ariete; tempestad la idea.