La virginidad escasea
[Minicuento - Texto completo.]
Marco DeneviLos lapitas pusieron sitio a Dodoma y exigieron, para levantarlo, que les cediesen por una noche todas las vírgenes de la ciudad. La cruel exigencia fue aceptada. A la noche llegó al campamento de los sitiadores una tropa de niñas impúberes, la mayor de las cuales no tendría más de ocho años. Comprendiendo que se trataba de una estratagema, los lapitas, que no eran afectos a la pederastia, entraron a saco en Dodoma, degollaron a todos los hombres y violaron a todas las mujeres, ferocidad que les permitió saber que no había habido tal estratagema.
FIN