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Las cuentas bancarias siempre abiertas…

[Poema - Texto completo.]

Wole Soyinka

Las cuentas bancarias siempre abiertas
Siempre sus saldos en rojo
El efectivo puede asentarse en el papel, todo cuanto dice
Es ¡Pan Pan Pan! Entre un millar de dedos
Asiendo con fuerza en la abundancia, los brazos
Amontonaron tantas lonas de pan que no pueden
Abrazar la humanidad. Cuentas bancarias siempre abiertas
Nunca comprendidas donde
Los niños aplastan cucarachas para merendar
Mientras esperan el regreso del padre forrajero
Los pensamientos de una inocencia hambrienta pueden devenir
Una cocina extraña, brochetas de moscas
En la punta de una escoba; escarabajos asados en su caparazón
Las babosas son reservas comprobadas de alta proteína –
Me han dicho. Nunca lo he probado.
Esperando el regreso del padre forrajero con el saco vacío
De esta forma, él fue y volvió, los dos años anteriores
Mañana él…

Recogí el extracto doblado
Que se había deslizado bajo la reja. Discretamente. Bajo el solemne
Brillo ensombrecido de mi buen amigo y enemigo
El dependiente bancario, guardián de cuello blanco de las bóvedas
Del papel, signos místicos, aquellos círculos y cruces
Que yo cargo. El lenguaje de su extracto establece:
La caridad debe ser calle de una sola vía, no,
La forma de vida de un hombre. Y así como la tinta
En que está impreso, me hago rojo bajo
Mi fraude negro, mi audaz y consabido
Maldita sea se han retardado nuevamente con ese cheque piel
Ustedes saben, mis derechos, una vez más me doy cuenta
tarde que todo está bien, preséntenlo a fin de mes
Maldiciendo la última extorsión de la que fui culpable
Por ser presa fácil. Lo he observado
El último cáliz de unas manos suplicantes es siempre
Más seco que el anterior. Y las ratas, son más ágiles ahora
Cuando sus ojos rasgados contemplan las batallas
Provocadas por mendrugos con sus recién incubadas bocas de avidez…

Ahora que fue hace tiempos, y ayer, y Ahora
Entre más larga sea la tirilla del extracto, más larga es la barra
Del pan, y ahora, nuevamente, el triste extracto
Arruinado por escépticas miradas pero Él, sabemos,
Devenga el cielo, domina una fortuna cuando pee
Y todo cuanto se lee es ésta única línea, listado de una transacción –
La caridad debe ser calle de una sola vía, no,
La forma de vida de un hombre Su balance señor
Su balance es esa figura trazada en rojo…
Una página, listo para enrojecer la cuenta, un débito cae abierto en
El crédito a siete años para alturas de siete pisos
De la séptima maravilla de un mundo de bolsillo
La séptima maravilla del plan de mentiras a siete años
Siete veces más grande que el último gran fraude.

Justificar el crédito a siete años para alturas de siete pisos:
Viviría allí, si pudiera. Yo erigí ese
Modesto monstruo de siete pisos por casa
Pero las obligaciones del plan a siete años exigen
Mi ausencia de allí, ¿y cómo semillas de siete años
No pueden cultivar un simple retorno verde de siete hojas?

Una hoja de balance ondea, bandera sobre alturas robadas
¿Y quién se hace rojo invisiblemente entre su fraude negro?
Una hoja de balance cuelga en jirones sobre yermos árboles
¿Y quién enrojece invisiblemente entre su negra desesperanza?
¿Y quién enrojece por quien enrojece, y quién da la vuelta cuando

A la luz, a través de esa vía deshecha, un fuego crepitante
Surge de los leños cuyo peso aún arquea
Dolorosamente la espalda de la bisabuela-
y una pregunta marca su peso?



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