Los hombres de mantequilla
[Cuento infantil - Texto completo.]
Gianni RodariJuanito Pierdedía, gran viajero y famoso explorador, llegó una vez al país de los hombres de mantequilla. Si les daba el sol se derretían, por lo que tenían que estar siempre a la sombra, y vivían en una ciudad en la que en lugar de casas había frigoríficos. Juanito se paseaba por las calles y los veía asomados a las ventanillas de sus frigoríficos, con una bolsa de hielo en la cabeza. En el portillo de cada frigorífico había un teléfono para hablar con el inquilino.
-Oiga.
-Diga.
-¿Con quién hablo?
-Soy el rey de los hombres de mantequilla. Todos de nata de primera calidad. Leche de vaca suiza. ¿Se ha fijado bien en mi frigorífico?
-¡Caramba, es de oro macizo! ¿Pero no sale nunca de ahí?
-En invierno, cuando hace bastante frío, y en un automóvil de hielo.
-¿Y si por casualidad sale el sol de improvisto mientras Vuestra Majestad está paseando?
-No puede hacerlo, no está permitido. Lo haría encarcelar por mis soldados.
-¡Buf!- dijo Juanito. Y se fue a otro país.
FIN