Nasrudín y Tamerlán
[Minicuento - Texto completo.]
Anónimo: Mundo árabe—Nasrudín —dijo el gran emperador Tamerlán—, ¡he decidido nombrarte juez supremo!
—Es un honor, Excelencia, pero no soy digno de ello.
—¿Rechazas un mandato real?
—No tengo elección, majestad. Un juez debe ser un hombre puro y justo.
—Cierto.
—Bien, he dicho que no soy digno. Si estoy diciendo la verdad, entonces no debería ser juez, y si estoy mintiendo, entonces, ¿cómo un mentiroso va a convertirse en juez supremo?
FIN