Casa digital del escritor Luis López Nieves


Recibe gratis un cuento clásico semanal por correo electrónico

Profecías

[Poema - Texto completo.]

José de Diego

Al Dr. Andrés Orsini

Amaba las repúblicas pequeñas,
con el amor de la ciudad nativa,
Rousseau inmortal, el hijo de las ondas
del lago azul y de las selvas líricas
que bajan de los Alpes, donde triunfa
cumbre de libertad, la breve Suiza.

La intensa luz de sus pupilas de águila
tendió el vate filósofo a la orilla
del Mar Tirrene, en cuyo fondo gime
la eterna gloria de la edad antigua,
y, contemplando a Córcega en silencio,
dejó esta hermosa profecía escrita:
—«Tengo el presentimiento de que al mundo
ha de asombrar esta pequeña Isla».

… Dos lustros no cumplidos, nació en Córcega
el nuevo Marte de la Francia olímpica;
el águila imperial que voló a Italia,
cruzó a Europa del Norte al Mediodía,
cantó de Grecia en los sagrados montes,
subió de Rusia hasta las cumbres rígidas
y cayó en Santa Helena, desde el cielo,
ante la tierra absorta, de rodillas…

Yo también, como el sabio de Ginebra,
siento una voz providencial divina,
Patria mía infeliz… ¡Oh, dulce Patria,
cuna y sepulcro de la raza india,
paraíso perdido entre las olas,
ideal apagado entre las brisas!
¡tú has de salir de tu profundo sueño,
para asombrar al Universo un día!

Allá, en el horizonte de los mares,
la verde luz de la esperanza brilla,
a través de los tiempos infinitos
en el curso triunfante de la vida…

¡Dios redentor, en los espacios libres,
tiene una estrella para cada isla!


Cantos de rebeldía, 1916


Más Poemas de José de Diego